martes, 30 de agosto de 2011

~Capítulo 14~

Un trueno iluminó el cielo y entonces rompió a llover como si no hubiera mañana.

En un momento, empezó caer una enorme tromba de agua.

-¿Dejando…que me muerda?-pregunté.

Harry asintió.

-N-no.-dijo Tom.

A estas alturas, estábamos todos ya empapados, como si nos hubiera dado por bañarnos en la fuente.

-Es tu decisión.-me dijo Harry.

Asentí con convicción.

-No hagas nada de lo que te puedas arrepentir…-me previno Danny.

-No me voy a arrepentir de salvarle la vida a Tom.

-¡Pero puedes morir tú!¿Has visto en qué estado te encuentras? Tom necesita mucha sangre para recuperarse…e incluso estando bien, sería arriesgado.

-Da igual, Danny, no puedo dejar que muera.

-Pero…

-No intentes convencerme, la decisión está tomada.

Agaché la cabeza y miré a los ojos a Tom.

-No puedo dejar…que…

-Calla, Tom.

Me incliné sobre él.

-No puedo dejar que…

-No tenemos mucho tiempo, Tom. Por favor.

Otro trueno tronó en el cielo y llovió aún más.

-Por favor.-le pedí de nuevo.

Entonces, lo sentí.

Sentí sus colmillos clavándose en mi hombro, cómo succionaba y cómo mi sangre abandonaba mi cuerpo para introducirse en el suyo.

No dolía en absoluto, era una sensación…placentera.

Pero me sentía muy pesada, muy cansada…solo me apetecía cerrar los ojos y descansar.

-Tom.-le llamó Harry.-¡Tom, basta!¡Ya tienes suficiente!

En ese momento, me desmayé.

[POV Danny]

Vale, no es que Tom mordiera a Cris me hiciera mucha gracia…pero reconocí que tenía que hacerlo.

-¡Tom!-le gritamos todos al unísono, pero él no la soltaba.

Empecé a asustarme. ¿Y si no podía parar el ansioso de mi amigo? ¿Podría soportar Carol perder a otra amiga? Y…¿sería capaz yo de perder a Cris…así?

Me arrodillé al lado de Tom.

-Tom, tío, mírame a los ojos. Así, eso es…y ahora, para. Venga, sé que puedes hacerlo. Suéltala.

Así lo hizo y Cris cayó, desmayada, en mis brazos.

Tom se incorporó, renovado por completo.

No tenía el más mínimo rasguño, ni signo de que hubiera estado peleando.

La estaca se la había sacado Harry mientras se alimentaba de Cris.

Había que ver qué efectos tenía la sangre humana en nosotros.

-¡Dime que no la he matado!-Tom cogió a Cris en brazos.-¡Dime que no está muerta!

Harry se agachó a su lado.

-No, no lo está, pero…

-¡¿Pero qué?!-le gritó Carol, nerviosa.

-Pero…está muy mal. Podemos ponernos en lo peor si no la llevábamos a un hospital de inmediato.

-¿Pues entonces se puede saber qué hacemos aquí? ¡Vamos volando!

-No, será mejor que tú y yo vayamos al hotel.-le dijo Dougie.-Estás muy alterada.

-¡No, yo quiero ir también!-se quejó ella.

Tom se levantó, con Cris en brazos colgando inerte.

-Yo me voy rápido.

-Sí, vete. No aguantará mucho más.

-Voy contigo.-le dije.

Tom echó a correr y yo le seguí. Al instante, se nos unió Harry en nuestra carrera bajo la lluvia.

-Vamos, Cris, aguanta.-oí que le susurraba Tom a Cris.

[POV Carol]

Vi como aquellos tres se marchaban con mi amiga.

Entonces, oí la sirena de un coche de policía.

Alguien, alentado por la pelea, debía de haberlos llamado.

-¡Corre!

Me subí a la espalda de Dougie y este echó a correr hasta llegar al hotel.

Una vez allí, en la habitación, empecé a romper cosas a diestro y siniestro.

Dougie no decía nada, solo miraba con pena las cosas que tenían la mala suerte de sufrir mi furia.

Cuando me cansé de romper cosas, me dejé caer sobre la cama.

Dougie se tumbó a mi lado y yo apoyé la cabeza en su brazo.

-¿Pero cómo ha podido Rebe hacernos eso?¿Y Cris? ¿Qué la va a pasar ahora? ¿Y qué pasa si Rebe vuelve?¿Habrá que matarla? ¿Por qué ha cambiado tanto?

En ese momento, una lágrima cayó por mi mejilla y Dougie me la secó con la mano.

Giré la cabeza y le miré a los ojos.

Estábamos prácticamente frente con frente.

Por un momento, pude ver como en sus ojos azules aparecían las pupilas de gato, pero en un parpadeo desaparecieron.

Él se acercó más, a la par que yo y… nos besamos.

Cuando me separé de él, nos miramos y, sin saber por qué razón, empezamos a reírnos.

[POV Danny]

Siguiendo a Tom, conseguimos llegar al hospital más cercano.

Tom estaba de los nervios, por mucho que le dijéramos Harry y yo que Cris no se moría.

Entramos en la sala de urgencias, donde en ese momento, no había nadie.

-¡Joder!-gritó Tom.

Un médico hizo su aparición y se acercó a nosotros.

Vimos el cielo abierto.

-¿Qué ha pasado?

-Una pelea con unos borrachos.

Se nos quedó mirando.

-Vuestras caras me suen…

-¡Nuestras caras son lo de menos, por favor, ayúdela!-le gritó Tom.

El médico se fue y volvió acompañado de unos enfermeros que portaban una camilla.

-Deposítala en ella.

Lo hizo.

Los enfermeros corrieron y se la llevaron a través de unas puertas correderas, nosotros les seguimos.

-Lo siento, pero no pueden pasar.-nos dijo el médico.

-¡Por favor, tenemos que ir por ella!

-Lo siento, pero no puedo dejaros pasar. No es por mí, son las normas de este hospital.

-¿Y si le damos un autógrafo? ¡Vamos, que tenemos contactos!

Al médico le brillaron los ojos, pero se fue antes de que pudiéramos sobornarle más y acabara cediendo.

Una recepcionista nos pidió que esperáramos ahí, en la sala de espera.

Los tres nos sentamos, esperando.

Los tres estábamos preocupados, pero Tom estaba totalmente desesperado.

Se levantaba, se paseaba de acá a allá, se volvía a sentar y apretaba con fuerza el posa brazos metálico de la silla.

Lo apretó con tanta fuerza que lo acabó doblando. A ver cómo explicábamos eso.

-Pues Tom, al final me has ganado. Dije que yo sería el primero en morderla. ¿Y qué tal sabe?

Si no llega a ser por Harry, Tom me hubiera hecho lo mismo que al posa brazos de la silla.

-Venga, Tom, que solo era una broma. Relájate, hombre. Cris está bien.

-Eso espero, porque como le pase algo…será por mi culpa, Danny.

-No pienses así, Tom. Cris todavía tiene que aprender a tocar Falling in Love, ¿recuerdas?

Sonrió.

-Sí, es verdad.

Le di unas palmadas en la espalda.

-Pues ya está.

En ese momento, volvió el mismo médico de antes.

Los tres nos levantamos de un salto.

-¿Y qué, doctor?¿Está bien?¿Qué ha pasado?¿Dónde está?¿Podemos verla?

-Calma, calma, chicos. Ella está bien. Ha perdido bastante sangre, pero ya hemos conseguido estabilizarla. Por lo demás, tiene un golpe en la cabeza, aunque no es serio, el brazo izquierdo roto y unas cuantas contusiones en el pecho, pero por lo demás está bien, no corre ningún peligro.

-¡Bien!-Tom nos abrazó a mí y a Harry con fuerza. Pensé con temor que quería troncharnos como al pobre posa brazos.

-¿Podemos verla?-pregunté, mientras me escapaba de los brazos de Tom y dejaba a Harry solo y aterrado en ellos.

-Sí, la acabamos de subir a la habitación número 313. Aún no está consciente, pero puede despertar en cualquier momento.

-Gracias, doctor.

Este asintió y nosotros subimos a la habitación de Cris.

Esta estaba tumbada en una cama con esas típicas sábanas blanco neutro de hospital con la típica bata azul.

No sé por qué pero supuse que esa bata no le iba a hacer mucha gracia y quería estar ahí cuando despertara para ver la reacción.

Tenía el brazo izquierdo escayolado y una venda en el lugar donde Tom le había clavado los dientes. Estos médicos…si ellos supieran…

Tom cogió una silla y se sentó junto a la cama.

-No sabes el susto que nos has dado, Cris.-dijo.

Harry y yo asentimos con la cabeza. Cogimos también unas sillas y nos sentamos junto a ella.

-Tíos…no sé como Rebeca fue capaz de esto.-dijo Tom.

-Peter no pudo haberla cambiado tanto. En el poco tiempo que pasamos con ella, me pareció…no sé…una chica normal.-dijo Harry.

Suspiré. Yo tampoco había notado nada malo en ella.

-Lo peor es que tengo el presentimiento de que Peter y ella no dejará las cosas así.

-Pues podrían dejarlo tal y como están-respondí.

-Sí, pero…

En ese momento, el médico interrumpió en la habitación y tuvimos que callarnos.

-El tiempo de visitas se ha acabado.

Le tendimos rápidamente un autógrafo.

-¿Podéis poner que es para Alice? Es mi hija.Así, gracias. Disponéis de diez minutos más.

Y así va el mundo, con sobornos.

-Yo de lo que tengo miedo es de que esa vuelva aquí por la noche y… bueno… acabar lo que había empezado.

-Pues alguien tendrá que quedarse aquí con ella, porque dudo mucho que ese nos deje quedarnos a los tres.-le dije.

-Bueno…o quizá sí.

-¿Qué estás pensando, Harry?

Cuando el médico volvió decidido a echarnos, le ofrecimos un pase de Meet and Greet para su hija, pero que lo traería Dougie cuando viniera mañana.

-Que contenta se va a poner mi hija. Está bien, podéis quedaros los tres.

Y así fue como, con otro soborno, pudimos quedarnos con Cris esa noche.

Como a las cuatro de la mañana, no pude soportar por más tiempo los pitidos de las máquinas y eso y decidí salir a que me diera un poco el aire.

-Yo no me muevo de aquí, no vaya a ser que despierte, se vea sola y se asuste.-dijo Tom.

-Voy contigo-dijo Harry.-De paso le enviaré un mensaje a Dougie para que se saque de la manga un pase de esos, que si no ese médico es capaz de matarnos a los tres.

-Bueno, que lo intente. Verá qué sorpresa se lleva.

Harry y yo salimos de allí, dejando a Cris a cargo del canguro Tom.

[POV Cris]

Abrí los ojos y lo vi todo blanco y borroso.

¿Qué pasa? ¿Me había muerto? ¿Esto era el cielo?

Entonces, vi algo borroso que se aceraba a mí. Tenía pinta de humano.

¿Sería un ángel?

Alargué las manos para intentar aferrarme a él. Bueno, solo alargué un brazo, porque el otro no me respondía.

Entonces, el ángel habló.

-Au.

Sin querer, le había metido el dedo en el ojo al ángel.

Parpadeé con fuerza para ver con más nitidez y cuando abrí los ojos me encontré con la cara de Tom.

-¡Tom!-grité.-¡Estás vivo!

-¡Cris!

Corrí a abrazarle, pero solo me fue posible hacerlo con un solo brazo. El otro lo tenía escayolado.

-¡Tom! Pero…¿qué ha pasado? Sé que sonará estúpido, pero en todas las películas lo preguntan…¿dónde estoy?

Tom sonrió.

-En un hospital. Te desmayaste y salimos corriendo hasta aquí, temiéndonos lo peor. ¡No sabes el susto que nos has dado, chica!

-¡Nada comparado con el susto que me diste tú!

-Oh.

-Pensé…pensé que te me morías.¡Y no podía permitirlo! ¿Ves? Ahora tú estás a salvo y yo estoy bien también.

-Pero podrías haber…

-Por poder, podrían haber pasado muchas cosas, Tom, pero gracias al cielo, todo está bien. Tú y yo estamos vivos y lo demás, poco importa.-hicimos una pausa.-Y, ¿así que os asusté? ¡Oh, eso es que me apreciáis!

-¿Cómo no íbamos a hacerlo?

-Gracias.

-Esto es inaudito.

Sonreí.

En ese momento, Danny y Harry entraron.

-¡Chicos!-grité con toda la alegría de mi corazón.

-¡Cris!

-¡A mis brazos!-dije, olvidando de que no podía mover uno.-Bueno…solo a uno, mejor.

Los abracé a ambos.

Estuvimos hablando todo lo que quedaba de noche, y me contaron lo de que tenía un brazo roto y eso.

-No, si ya me he dado cuenta de ello, ya…-rieron.-¿Me firmáis la escayola? En calidad de amigos.

Rieron.

[POV Carol]

Me desperté por la mañana y Dougie sugirió ir a ver a Cris.

-Claro, ¡vamos!

Dougie miró el móvil.

-Vaya, Harry me llamó…¿dónde estaría que no lo oí? Menudo estoy hecho.-escuchó el mensaje.

-¿Es algo grave?-pregunté, preocupada.

-No, nada de eso. Cris está bien, pero…me piden que lleve un pase de Meet and Greet y que luego me cuenta por qué. ¿Para qué diantres lo querrá?

-No sé, es Harry. Tú lo conoces mejor que yo.

-Al menos, da esa impresión.

Los dos nos reímos.

Aún quedaban nubes en el cielo por la tormenta de anoche, así que Dougie no tuvo problemas en salir a la calle.

Llegamos al hospital, cuya dirección nos la había dado el bueno de Harry en aquella llamada y nos encaminamos a la habitación de Cris, cuyo número también nos había dicho.

Antes de entrar, oímos unos gritos.

-¡Te lo juro, Danny, te voy a ahogar con la cuerda del suero!

Esa era Cris, sin duda.

-¡Oh, no, piedad!

Y ese Danny.

Entramos y vimos a Cris balanceando en el aire la cuerda del suero y a Danny alejado de ella, por si las moscas.

Tom y Harry reían sentados en unas sillas.

-¡Te voy a enseñar yo a ti a reírte de mi bata! ¡Vale que sea roñosa, pero cuando la llevo yo no! ¡Ven aquí y ponte tú una, cobarde!

-¡No,no! Si yo ya estoy bien con la ropa que estoy…

-¿Hola?-pregunté.

Ninguno se había percatado de nuestra presencia.

-¡Carol!-Cris soltó automáticamente la cuerda del suero.-¿Cómo tú por aquí?

-¡Pues he venido a verte a ti, tonta!

-¡Jo, qué bonito! Muchas gracias.

-¿Qué, qué tal estás?

-Bien.-señaló su brazo roto.- Con un brazo menos.

-Pero viva.

-¡Sí, eso sí! Pero con un brazo menos.

Cuando se le metía algo en la cabeza, era difícil de sacar.

Dougie y yo nos sentamos en unas sillas, y Cris permitió a Danny que se sentara en su cama, pero en una esquina lejos de ella hasta que no le pidiera perdón por decir que la bata le quedaba bien.

-¿Pero no era eso lo que querías que te dijera, que te quedaba bien?

Cris le bufó y después se echó a reír.

-Sí y no. Yo me entiendo.

-Pues menos mal que tú te entiendes.

2 comentarios:

  1. Jo, qué bonito...Yo con una amiga en el hospital muriéndoseme (?) y yo de Party con Dougie...Me gusta!! xD

    Cris, me gustan tus habilidades para meter a Rebe de por medio ^^

    ResponderEliminar
  2. Para cuándo el 15?? estoy deseando leerlo! Muchos besoss ^__^

    ResponderEliminar