viernes, 9 de septiembre de 2011

~Capítulo 17~

[POV Cris]

-Podemos bajar a la piscina.-propuso Danny.

-¿Los vampiros podéis bañaros?-pregunté.-Tenía entendido que no os llevabais bien con el agua.

-¿Pero acaso no nos has visto ducharnos?

-No, Danny, no tengo por costumbre colarme en las duchas ajenas.

-Ah, ni yo.

-No mientas, Danny, que siempre que voy a ducharme, me persigues.-dijo Tom.

-No Tom, yo no te persigo, yo te escolto. No es lo mismo.

-¡Anda ya!

-Jo, Tom, encima que velo por ti para que no te pase nada me llamas acosador…-ya volvía Danny a hacerse la víctima. Siempre encontraba el momento propicio para ello.

-Bueno, ¿qué pasa con el agua?-dije, para que todos desviaran la atención de Danny y le dejaran solo con sus penas.

-Nada-me respondió Tom.- Bram Stocker y los demás autores de ese género se inventaron eso, junto con muchos otros mitos más, como los crucifijos o la sal.

-Autores…siempre inventándose cosas-bromeó Harry.

-Ahá, pero…¿cómo voy a bañarme?-pregunté mientras señalaba mi brazo.

-Fácil. Un momento.-Tom salió corriendo y volvió en un abrir y cerrar de ojos con algo transparente entre las manos.-Extiende el brazo.- así lo hice y me colocó la susodicha cosa.-Esto es una funda.-me explicó, al ver la cara de incomprensión que tenía.- Con ella, podrás bañarte sin temor a que se te moje la escayola, eso sí, con precaución que no quiero que te lastimes.

Le sonreí.

-¡Muchas gracias! Pero, ¿cómo…?

Me sonrió él a mí, como disculpándose.

-Me pareció que alguna vez te podía hacer falta y le pedí a Jake que me consiguiera uno y…

-¡Eres un cielo, Tom!-exclamé, abrazándole.

-Entonces…¿ya no hay ningún problema con la piscina, no?-inquirió Danny, mirándome.

-No, ya no.-le sonreí.

-¡Estupendo!-dijo, dando una sonora palmada.-Pues venga, todo el mundo a ponerse el bañador.

-Me pido cambiarme en el baño.-dijo Dougie.

-Ni hablar Doug. Tú te vistes aquí con nosotros.-le dijo Harry, tajante.

-¡Ala! ¿Y por qué, Harry?-se quejó este.

-Porque no tienes nada que ninguno de nosotros no hayamos visto ya.

Carol y yo miramos a Dougie y un enorme “That´s suspicious” se dibujó en nuestros rostros.

-Uhhh.-dijimos al unísono.

Mientras que Doug estaba distraído intentando desesperadamente explicarnos eso de “porque no tienes nada que ninguno de nosotros…”, Harry, Tom y Danny lo agarraron y lo tiraron sobre una cama.

-¡Y ahora te vas a vestir con nosotros!

-¡No,no! ¡Jamás!

-¡Por las buenas o por las malas, Doug, tú verás!

-¡Por ninguna, Harry!

-¡Cómo quieras! ¡Tom, sujétale! ¡Danny, quítale los pantalones!

-¡No, piedad!

-Me voy a cambiar…-informé mientras cogía mi bañador y me encaminaba al baño.

-Yo creo que me quedaré-me dijo Carol.

-Claro, haber cómo desnudan a Doug, ¿no? Pobre hombre.-puse los ojos en blanco, me compadecí de él y entré en el baño.

Salí vestida para encontrarme a Doug corriendo por el pasillo como su madre lo trajo al mundo y a Carol, Tom, Harry y Danny rojos por la risa.

-Anda que…ten amigos para esto, ¿eh?-le dije.

Este entró corriendo en el baño y cerró la puerta tras de sí.

-De verdad, que malos que sois con el pobre chico.-les reprendí.

-Pero es divertido.

-Sí, nos divierte.

Cuando todo el mundo se hubo cambiado, bajamos todos como buenos amigos a la piscina, que estaba solo para nosotros porque no había ni Dios.

Tom aspiró el “puro” aire con olor a cloro se la piscina.

-¡Ah! Que buen día para darse un baño.

Claro. Estaba nublado.

Dougie y Danny le dieron un toallazo a Harry en la cara y este empezó a perseguirlos por la piscina, corriendo en cuadrados, ya que la piscina era cuadrada.

-Anda Carol, vamos a tumbarnos en estas hamacas de plástico a que nos dé el sol.-le dije a mi amiga.

-¿Qué sol?

-¡El sol que iluminemos!

Ante esta parida, nos tumbamos las dos en las mencionadas hamacas blancas de plástico.

Harry había pillado a Doug y trataba de arrojarlo al agua, mientras Danny tiraba de Dougie de un pie para intentar salvarle. Tom bajaba las escaleritas de las escaleras y cuando le llegaba a la cintura subía corriendo diciendo que estaba muy fría, para darse la vuelta y volver a meterse y subir de nuevo corriendo.

Los chicos vinieron.

-Eh, venga, meteros.

-Que no, que está fría.

-Vamos, que no queremos jugar solos.

-Pues os chincháis.

-Jo.

Se miraron entre ellos y sonrieron.

Malo.

Tom y Danny agarraron mi hamaca y la levantaron del suelo, haciendo Dougie y Harry lo mismo con la de Carol.

-¡Eh!-gritamos las dos mientras nos llevaban hasta el agua.

-No es nada personal, ¿eh?-nos avisaron.

-¡Carol! ¡Esto es el fin!-la dije.

-¡No, piedad!

-No,no.

Y sin previo aviso volcaron las hamacas y caímos las dos a las profundidades de la piscina.

Saqué la cabeza e intenté salir por el bordillo pero me escurrí y caí al agua de una forma un tanto imbécil.

Se rieron de mí.

Carol también optó por salir por el bordillo pero Doug salió a impedírselo.

-No,no, tú no sales.

Y la empujó hacia dentro, pero Carol fue más rápida, lo agarró y él también fue arrastrado hacia el agua.

Mientras se reían de ellos yo me salí por la escalera y me oculté tras Danny para vengarme.

Cuando Danny se acercó al borde de la piscina, fui corriendo a empujarle pero él se movió ligeramente hacia la izquierda y caí al agua con mis planes frustrados.

-¡Ja,ja!-se rió de mí, cual Nelson.

-¡Quién ríe el último, ríe mejor!-le recordé.

-Sí, pero de momento quién ríe soy yo.

-No por mucho tiempo.

En ese momento, Harry cogió en brazos a Danny y lo lanzó al agua.

-¡Traidor!-gritó, antes de caer.

-Jo Harry, muchas gracias. Que sería de mí sin ti.

-Quién sabe.-me respondió.

Entonces fue Tom y lo tiró al agua.

-¡Traidor!-le gritó este también.

Nos pusimos todos de acuerdo y salimos corriendo a pillar a Tom. Y a rastras, lo tiramos al agua.

Una vez en el agua todos, nos pusimos a jugar. Primero nos hicimos los ahogados, después, los náufragos. Nos lanzamos olas de agua, aunque lo que Harry nos lanzaba parecían tsunamis.

-Oye, ¿y si jugamos a los caballitos esos y nos empujamos?-sugirió Carol.

-¡Vale!

-¡Dougie! ¿Quieres ser mi montura?-le preguntó.

-¡Vale!-le contestó alegremente.

¿Y sobre quién me subía yo?

Con Tom tenía las de perder seguro, parecía el más pacífico, con Danny…bueno…más que jugar, se empeñaría en tratar de tirarme de encima suya cual potro salvaje y Harry…podría ser.

En ese momento, se me acabaron las opciones porque Harry agarró a Tom y le dijo que tenían que derrotar a Dougie. Así que eso me dejaba a mí con una sola opción.

-¡Danny! ¿Quieres ser mi podenco?

-¡Sí hombre! ¡Sé tú el mío!

-¡Ja, que más quisieras tú! Venga va Danny, no seas malo…

-Bueno…vale.

-Chachi.

Me permitió subirme encima.

-Y ahora, vamos Danny, rumbo a la victoria.

Empecé a darme manotazos con Carol, mientras Tom le pegaba collejas a Dougie y Harry le metía patadas a Danny por debajo del agua, que saltaba para esquivarlas. Entonces, sin saber bien cómo, Tom le metió el dedo gordo del pie a Harry por la nariz y se empezó a partir de risa, Carol y yo aprovechamos para empujarlos y los dos cayeron con un sonoro y acuático “plaf”.

-Habéis perdido.-les dijo Dougie.

-Jo Harry tío, no puede ser contigo.

-¡Anda que contigo!

Mientras discutían sobre quién tenía la culpa de haber perdido y se hacían ahogadillas mutuamente para ver quién tenía más razón de los, Danny enganchó a Dougie de las piernas cual cangrejo y nos caímos los cuatro.

-Jo, esto ha sido un empate.

-Sí.

Y seguimos nadando haciendo el chorra.

Entonces Harry descubrió un trampolín en la piscina, que estaría como a unos cinco metros. ¿Cómo no lo habíamos visto antes?

-Voy a tirarme yo primero.-anunció.

-¡Suerte!-le gritamos todos.

-Vosotros miradme bien y aprended.

En unos segundos ya estaba en lo alto y se disponía a saltar.

Hizo un salto con remolino, giro triple en el aire, con forma de canguro volador, costalazo y planchazo al final. Una actuación absolutamente sublime. Todos le aplaudimos.

-¡Ahora yo, ahora yo!-dijo Tom mientras se dirigía al trampolín.-¡Vais a ver el salto más impresionante que podáis ver!

Todos estábamos emocionados. ¿Qué iba a hacer Tom? ¿Un rulo en el aire? ¿ Se iba a sacer una espada láser de la nariz en la caída? ¿O iba a echar a volar para sorprendernos a todos?

Nada de eso. Se tiró de bomba.

-¡BOMBA!-gritó.

Cuando sacó la cabeza del agua todos le taladramos con la mirada.

-Joer, no me digáis que no ha sido divertido.

-Sí…divertido…-dijimos todos.

-Bueno, ahora yo.-dijo Carol.

-Suerte, amiga mía.-la dije.

Carol subió y nos saludó desde lo alto. La devolvimos el saludó.

Fue a saltar, pero cuando se proponía a ello, se escurrió con vete a saber qué y cayó al agua de una forma un tanto…patosa.

Nos reímos de ella, y ella nos contestó que mejoraría en el próximo salto.

-Bueno Dougie, te toca.

-El trampolín me llama.-dijo él.

Subió arriba del todo y nosotros esperamos y esperamos y esperamos…pero Doug no se tiraba.

-¡Qué yo no me tiro! ¡Qué está muy alto!-gritaba.

Se puso parecido a cuando estuvo con Ivette en Gosht hunting.

Carol fue en su ayuda.

-¡Doug, míranos!-le pedimos.

-Haber, ¿qué queréis?-dijo, medio asomándose.

En ese momento, Carol lo empujó y cayó al vacío.

-¡Creí que eras mi amigaaaaaaaaa!-dijo mientras caía. Sacó la cabeza del agua.-Eh, pues ha sido divertido.

-¿Ves, tonto?-le dijimos todos.

-Bueno Danny, ahora te toca a ti.-le dije.

-¿Y por qué no vas tú?

-Yo después de ti.

-Claro, por si muero yo, ¿no?

-No. No puedes morir.

-Oh. Bueno, me voy a tirar.

-Vale.

Se fue y se subió arriba.

Se puso a bailar uno de esos bailes que hace él.

Nos reímos de él y saltó para tirarse, pero en el último momento se agarró con las manos al trampolín y se quedó colgando allí.

-¡Oh, Danny!-grité y corrí a salvarle.

Subí a lo alto del trampolín. “¡Leches! ¡Qué alto está! Y yo que tengo vértigo…”. Fue arrastrándome hasta llegar a la punta del trampolín, donde Danny se agarraba.

-Hola.-le saludé amigablemente.

-¡Eh! ¿Cómo tú por aquí?

-No sé…¿qué haces ahí colgando?

-Me lo pensé mejor y en el último momento no quise tirarme.

-Vale. Yo te ayudo.

Puse mis manos sobre las suyas.

-Que amable.-dijo con una sonrisa.

-Sí…amable…

En ese momento, le solté las manos.

Me recordó muchísimo a la muerte de Mufasa del Rey León, cuando Scar o como se diga le suelta las zarpas al pobre león.

-¡Creí que eras mi amigaaaaa!-repitió, antes de caer.

Me senté en el trampolín y comencé a reírme a carcajadas de él.

1 comentario:

  1. ¡¡TRAIDOOOOOOOOOOR!!! ¡CREI QUE ERAS MI AMIGAAAA!! Eso ya lo he vivido en mis carnes xDDD ¿Para cuándo el 18? ^^

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