martes, 6 de septiembre de 2011

~Capítulo 16~

[POV Cris]

Oía a Dougie y a Carol cuchichear.

A mi izquierda, Danny contaba muy entusiasmado los puntitos del gotelé de las paredes y a mi derecha, Tom había cerrado los ojos e intentaba descansar, que no dormir.

Suspiré. No había manera de dormirme.

En ese momento, un cojín salió volando e impactó contra Tom.

Empezó entonces una guerra de cojines entre Danny y Tom, cojines que me pasaban a un palmo de la cara.

Me harté de sus estupideces y me levanté.

-¡Eh! ¿Adónde vas?-me preguntó Danny mientras me lanzaba un cojín y me daba en la nuca.

Me dieron ganas de cogerlo del suelo y hacer que se lo comiera, pero preferí dejarlo pasar.

Le ignoré, agarré la colcha de la cama de Harry, la quité, me tumbé y me tapé. Harry, como era lógico, estaba tumbado en su cama.

-¡Eh! ¿Qué haces ahí?-el insistente Danny no cesaba en su empeño de querer saberlo todo.

-A Harry no le importa…¿no?-pregunté.

-Por supuesto que no.

-Gracias.

-¿Pero por qué duermes con Harry?

Me di la vuelta, dándole la espalda a Danny.

-No hay quien le soporte.-le dije a Harry.

-Qué me vas a contar…

Reí. Madre, que majo que era Harry. ¿Por qué no me había dado cuenta antes?

Entonces, alguien se hizo también con las sábanas de Harry y se metió en su cama.

-Si tú duermes con Harry, yo también.

-¡Danny, vete a tu cama!-le dije.

-No.

-¡Vete!

-No.

Empecé a lanzar manotazos al aire en su dirección para intentar echarlo, pero él me respondió con otros.

El pobre Harry estaba en medio de los manotazos y nada podía hacer para salvarse de ellos.

-Haber, si os queréis matar, mataros, pero dejad dormir.

Dougie carecía de sentimientos.

-Como si fueras a dormir tú mucho, Dougie.-le respondió Harry, entre manotazo y manotazo.

-Cris, te vas a hacer daño en el brazo.-me dijo Tom.

-No importa.

Ese ahora mismo, era el menor de mis problemas.

-¡Vamos, vete!-le dije.

-¡Vete tú!

-¡Yo ya me fui de mi cama por tú culpa!

-Bueno…¡pues vete otra vez!

-¡No, Harry quiere que duerma con él! ¿Verdad, Harry?-le pregunté a Harry.

-¡Harry quiere dormir conmigo! ¿Ves? Mira como asiente.

-¡Pero si no ha hecho nada! ¡Anda, vete!

-¡Vete tú, chica!

-Pues nada, me voy yo.

De un salto, Harry se salió de la cama y nos dejó a Danny y a mí allí.

-¡No, Harry! ¡No me dejes con esto aquí!-le pedí.

-¡No me tortures de esta forma, Harry!

-A mí no me metáis en vuestras peleas matrimoniales.-dijo este como respuesta.

-Uhhhhhhhhhhhhhhh.-dijeron Carol, Tom y Dougie.

-¡Ja! No estamos casados.-dijo Danny.

-Y Dios me libre…-dije yo.

Los demás se rieron.

-Bueno, yo me voy a tu cama, Cris. Dormir vosotros ahí.-nos informó Harry.

-Danny tiene su cama.-recordé.

-Pero ahora quiero dormir en la de Harry.-me respondió Danny, el muy caprichoso.

-Tú no duermes.

-Pues lo que sea que yo haga.

-Pues yo también quiero dormir en la de Harry, así que no me voy a ir.-le dije, tercuza de mí.

-Pues no te vayas.

-No, descuida, eso es lo último que haría.

-Uhhh, van a dormir juntos.-metieron baza todos.

-¡Qué Danny no duerme!-les grité.

-¡Pues lo que sea que él haga!-me respondieron ellos.

Les gruñí a todos.

-Bueno, a mí mientras que no se mueva de su sitio me da igual.-dije, tapándome.

-Como si tuviera yo necesidad de moverme…

-Que sí, que vale.

-Bueno, ahora sí, todos a dormir.

-Tom, nosotros no dormimos.-le dijo Harry.

-¡Pues lo que sea que nosotros hagamos, Harry!

-Vale, vale.

Se hizo el silencio.

Miré a Danny.

No había mucha claridad en la habitación, pero podía distinguirle las facciones de la cara y él podía verme a mí perfectamente.

-Me odias.-me susurró él. No era una pregunta.

Por toda respuesta, le di la espalda.

Oí como él también se daba la vuelta, dándome a su vez su espalda.

“Tonto”-pensé.-“ Si supieras de verdad lo que pasa, si fuera capaz de decirte que…”

[POV Danny]

¿De verdad me odiaba?

No, por supuesto que no.

Lo había visto en sus ojos.

Había algo que quería decirme pero se había callado.

¿Qué sería?

Cris estaba acurrucada en la esquina izquierda de la cama y yo tenía para mí todo lo restante.

Me estiré cual largo era acaparando todo el espacio que quedaba libre.

Cerré los ojos.

Los vampiros no podíamos dormir, pero sí que podíamos descansar. Era como una especie de letargo.

Llevaba un rato descansando cuando Cris se movió. Se dio la vuelta y apoyó la cabeza en mi hombro.

Tenía los ojos cerrados y respiraba tranquila, por lo que supuse que estaba dormida.

Cerré los ojos de nuevo e iba a perderme de nuevo en mis pensamientos cuando lo oí.

-Danny, que no te odio. Todo lo contrario.

Abrí los ojos, pero ella se había movido de nuevo y me daba la espalda.

¿Había chica más enigmática?

Sonreí.

[POV Cris]

Después de decirle eso a Danny, pude encontrar la paz interior necesaria para dormirme.

Me despertó el majoso de Tom, que se dedicaba a saltar de cama en cama imitando a una rana.

-Auuuuuuuuuuum.-me quejé cuando saltó sobre mí.-Fuera, niño rana.

-Croak.-y saltó a otra cama.

Me incorporé y bostecé.

El bostezo es contagioso y todos empezaron entonces a bostezar. Comenzó entonces un concurso de bostezos.

El de Harry fue tan bestia que los de al lado golpearon las paredes para pedir que nos calláramos.

Todos le aclamamos, le declaramos vencedor, nos vestimos y bajamos a desayunar.

Carol y yo nos hicimos unas tostadas de media barra de pan, bajo la atenta mirada de Tom.

-Tom, que ya sabes que no puedes comer.

-Como decía Shaw, “no hay amor más sincero que el amor a la comida”.

-Tom…cada día nos sorprendes más.-le dijo Harry.

Cuando fue la hora, nos aberronchamos todos a la furgoneta encargada de llevarnos al recinto donde tendría lugar otra prueba de sonido para otro concierto.

Mientras jugábamos al veo veo y cuando llevábamos más de la mitad del trayecto, se nos pinchó una rueda.

Danny y Tom se bajaron a ver qué podían hacer.

-La rueda se ha desinflado.-dijo Tom.

-Pues ya sabes, Tom, ínflala.-le respondió Danny, como si fuera algo rutinario en su vida inflar ruedas a pulmón.

Tom asintió, tomó una enorme bocanada de aire y la infló.

Carol y yo alucinábamos.

Tom colocó la rueda y pudimos proseguir nuestro camino.

Finalmente, llegamos sanos y salvos al recinto indicado.

-¡Woaoooooooooow!-exclamó Carol al ver el escenario.-¡Por fin voy a poder asistir a una prueba de sonido de McFly!

-Cris ya es toda una veterana en esto…¿verdad?-me dijo Danny, apoyando sus manos en mis hombros.

-Danny, solo he venido una vez más que ella…-dije, sonriéndole.

Empezaron a ensayar y Carol y yo nos pusimos en una esquina sentadas, mientras hablábamos de todo y de nada a la vez.

Cuando terminaron, nos invitaron a ir con ellos al escenario.

Carol fue a contemplar de cerca la mítica batería del mítico Harry.

-¡Dios, es tan…!-dijo.

No llegamos a saber lo que era, porque en ese momento, un foco se desprendió del techo y hubiera impactado sobre mi amiga si no fuera porque Dougie, que estaba en la otra punta de la sala, la apartó a tiempo, saliendo los dos rodando por el suelo.

-¿Estáis bien?-pregunté, alarmada, mientras corría hacia ellos.

-Sí,sí, estamos bien.

-¡Por Dios, que susto!

Tuvieron que reponer el foco, el cual se había hecho mil pedazos al impactar contra el suelo.

-¡Gracias, Doug! Por salvar a mi amiga.-le dije.

-Ha sido un placer.

Entre ellos hubo una mirada de complicidad y decidí que allí sobraba.

Me aventuré en la búsqueda de alguien que me comprendiera y me choqué con Danny.

-¡Ah! Hola Danny, hola.

-Cris, ¿cómo tú por aquí?

-No sé, buscaba alguien que me hiciera caso.

-Y te chocaste conmigo.

-Fue un accidente.

-O eso quieres aparentar.

-Sí…

En ese momento, Tom apareció con unos cubos.

-¿Os acordáis del concierto ese que hicimos eso del solo de Harry y nosotros haciendo ruido? Podemos repetirlo en este.

-¿Y eso, Tom?

-Pues es que me encontré estos cubos que los iban a tirar y he decidido darles un uso.

-Muy bien, Tom.

-Pues ale, a practicar.

Le dio a cada uno un cubo y unas batutas.

Carol y Dougie aporreaban sus cubos como si no hubiera mañana, muy compenetrados ellos y Tom de vez en cuando lo atizaba también con la cabeza.

Danny había perdido el control de sus brazos, y las batutas daban al cubo con precisión, creando ritmos cada vez más interesantes.

Yo miraba mi cubo, triste, por no poder ofrecerle nada más que un triste golpe con una batuta.

-¿Qué te pasa? ¿Por qué no aporreas?-me preguntó Danny.

-Solo tengo un brazo.-le dije, como si eso lo explicara todo.

-¿Te presto uno mío?

-¿De verdad?

-Claro.

Se puso detrás de mí y alargó un brazo.

-Después de ti.-dijo, invitándome a empezar.

No le hice esperar más.

Nos lo pasamos “teta”, tocando ritmos cada vez más alocados.

Danny empezó a hacerme cosquillas.

-Danny o paras o te aporreo la cabeza.

-Vale,vale.

-¡Para!

-¡Haha!

Como no cesaba, intenté golpearle con la batuta, pero él salió corriendo.

Lo di por perdido y dejé el cubo en un sitio donde no molestara.

Entonces, Harry se me acercó.

-Eh, Harry. ¿Cómo va eso?

-Bien, bien. ¿Y tú?

- Muy bien.

Se me quedó mirando.

-¿Qué pasa, Harry?

-Vamos, reconócelo.

-¿El qué?

-Sé que te gusta Danny.

Arrugué el entrecejo. Shit.

-Ya le gustaría a él que eso fuera así.

-Puedes contármelo. No se lo diré.

-Pero es que no hay nada que contar.

-Venga, que yo lo sé. Ayer hablé con Danny y se puso en el mismo plan. ¿A quién pretendéis engañar?

-A nadie.

-Ya, claro. Esas escenitas como la de ayer por la noche no son típicas de gente que no pretende nada.

Ups. Harry me estaba acorralando.

-Pero que…verás es que…

-¡Harry!

Harry puso los ojos en blanco.

-Maldito sea Jake, siempre llamándome en los momentos menos oportunos. ¡Voy, tío!-se giró hacia mí.-No te muevas.

-Vale.

En cuanto se alejó un poco puse pies en polvorosa y fui con Carol, que observaba como Tom y Danny metían, o lo intentaban, a Dougie en un cubo que luego tenían pensando tirar escenario abajo.

Ventajas de ser vampiro, supongo, que poco podía pasarte.

Finalmente, Harry fue en rescate de Dougie y acabó él rodando escenario abajo. Pobre hombre.

Cuando se levantó, le aplaudimos y nos fuimos a comer al hotel.

Después, subimos a la habitación.

-¿Y ahora qué hacemos? Tenemos todavía toda una tarde por delante.

1 comentario:

  1. Moooola! ¿Y por qué es Doug quién tiene que sufrir todas las desgracias? xD Es su destino, supongo (?)

    ResponderEliminar